WC. NO TODO ENTRA.


Siempre pensé que esas cosas solo pasaban en países lejanos, como Tailandia, la India o algún otro rincón del mundo, y que solo veías en vídeos de YouTube. 

Pero no. 

Esto me pasó a mí. 


Trabajaba en un almacén.

Entré al WC, levanté la tapa y, en principio, todo parecía normal. 


Pero algo llamó mi atención: una masa oscura flotaba en el fondo. "¿Qué demonios es esto?", pensé. "Vaya, alguien olvidó tirar de la cadena".


Justo cuando me disponía a accionar la palanca, me di cuenta de que esa masa no solo estaba flotando, sino que se movía.


"¿Qué?" pensé, atónito. "

¿La caca se mueve?" 


Nunca había visto algo como esto en toda mi vida.

Pero ¿que habrá comido ese tipo? 


Me acerqué para observar mejor y, cuando fijé la vista, algo más apareció. 

Dos orejas mojadas, un hocico con largos bigotes... ¡era una rata gigante de cloaca intentando saltar fuera del inodoro! 

Mi corazón se detuvo por un segundo.


Miré a mi alrededor buscando algo que pudiera serme útil en ese momento. 


Agarré mi móvil y comencé a grabar, porque claro, ¡nadie me iba a creer! 


Mientras filmaba, descubrí la fregona en el cubo. 


Con el palo de la fregona en la mano, intenté cerrar la tapa, a toda velocidad, pero la rata parecía determinada a no rendirse. Intentaba saltar al exterior.

Al final lo conseguí. 

La tapa cayó de golpe.

Tiré de la cadena, una, dos, tres veces, hasta que finalmente, solo vi agua limpia en el fondo. 


La rata había desaparecido.

Pero ¿Cómo había llegado hasta allí? 


No lo sabía, pero de algo estaba seguro: ese baño ya nunca sería el mismo. 


Investigué un poco después y descubrí algo inquietante: las ratas pueden sobrevivir bajo el agua durante mucho tiempo. 

Si su cabeza pasa por un agujero, sus huesos se adaptan y pueden atravesar espacios estrechos. 


Incluso sus uñas se agarran al tubo de pvc pudiendo subir por los bajantes. 


Así que sí, esa rata probablemente llevaba un buen rato por las alcantarillas, esperando el momento justo para salir.


De hecho lo supimos días más tarde. 

Una cuba tuvo que limpiar la arqueta de la portería de al lado, que estaba obturada por toallitas húmedas. 


Por eso el bicho opto por otro camino y llego hasta nuestro wc. 


Y ahora, cada vez que levanto la tapa, lo hago con más cautela. 


Porque, ¿quién sabe qué otras sorpresas me estarán esperando ahí abajo? 


Nunca subestimes lo que puede estar bajo el agua, ni lo que puede salir de la oscuridad. 


En la vida, las sorpresas siempre están más cerca de lo que pensamos. 


Hay que aprender a afrontarlas con valentía, aunque eso signifique enfrentarse a una rata de alcantarilla en tu propio baño.


#IncreíblePeroCierto #SorpresasDelBaño #HistoriasDeVida #CuriosidadesDeLaNaturaleza #PrecauciónEnElBaño #LeccionesDeVida #RatasDeAlcantarilla

Comentarios

Entradas populares de este blog

EL MALANDRÁN. UN MAVERICK MURCIANO.

ADOLESCENCIA. Una serie para ver y debatir.

MERCADONING.